Si, o... ¿no?

Abre bien los ojos a lo que te viene por delante, sin frenos y que puede chocar contra ti. Pon tus orejas a prueba para saber que es lo que realmente te dicen. Antes de hablar, párate a pensar si realmente lo que quieres decir es lo que se va a escuchar al momento. A veces, no siempre, decimos lo que no deseamos por culpa de los impulsos, y eso hace que cometamos los errores mas grandes de nuestra vida. Si ahora mismo acabas de asentir con la cabeza, es porque eres uno de los míos. Yo nunca he sabido que decir en muchas situaciones, pero a veces la cabeza se nubla por pensamientos como el odio, la rabia, el enfado o incluso el amor. Y no te deja pensar con la claridad que antes podías pensar. La rapidez, podrá no ser uno de mis fuertes, pero si que lo es la oportunidad. Si hay algo que aprovecho son las oportunidades, pero oportunidades que hagan ver a los demás mi sonrisa siempre. Oportunidades que no terminen en el baño de chicas, e incluso de chicos, llorando por algo que te ha pasado o mejor dicho, no te ha pasado. Pero nunca hay que dejar las oportunidades de lado, solo para mostrar el lado bonito que tenemos. Todos tenemos un poco de lado oscuro, y eso, junto con el buen humor, es lo que mas llama la atención.