El silencio habla.

Puede muchas veces que haya alguien que no se de cuenta de lo que dices. Otras muchas que no sepas que decir, y otras pocas que te oigan solamente. Cuando tienes algo que no puedes decir, muchas veces el silencio puede aportar más información de la que uno se cree. No te escondas detrás de tus palabras que será peor que enfrentarte a todo de una manera menos independiente. No puedes hacer que todo desaparezca, pero mucho menos hacer como si no hubiera ocurrido. Date cuenta de la cantidad de veces que queremos que algo no haya pasado. Piénsalo. Son tantas... Pero son aquellas a las que creemos que no podremos hacerle frente. A pesar de ser muchos momentos, son solo un número. Un número que apenas tiene importancia, y que mucho menos nos importará en la vida. ¿Acaso elegimos nosotros que vida vamos a tener? No. Ahí tienes el porque no debemos olvidarnos nunca de los momentos  que queremos que no hubieran pasado. Dicho y hecho. Dale vueltas, ponle frenos, pero al final todo acabará por hacerte mas daño si no vas de frente y demuestras lo que hay que tener para valorarte.