Nunca te rindas.

Es a veces, cuando estas cansado, que llegas a casa, los pies están a punto de reventar y te tumbas y sientes como el cosquilleo de estar encima de algo mullido te hace sentir tan bien. Pero en esos momentos también tienes la capacidad de soñar mas rápidamente y no siempre es bueno. Al día siguiente, te levantas, y cuando subes la persiana y el sol deslumbra tu habitación sabes que tienes que levantarte. Pero el cuerpo te pide estar un poquito mas tumbado en la cama, y ahí es cuando todos metemos la pata. Ahí es cuando la mente empieza a desarrollar todo lo que había pasado la noche anterior. Como el chico que te llamó la atención una vez, ya te la va llamando menos, y alguien nuevo se presenta. No alguien cualquiera, si no alguien que te ha hecho sentir y olvidar lo que una vez sentiste por primera vez, cuando eras inocente. Ese cosquilleo que te entraba cuando te hablaba y te paralizaba de arriba abajo, se vuelve a repetir de nuevo. El miedo te corrompe por dentro, puesto que la primera vez no te fue bien, y el mecanismo de defensa de tu cuerpo te pone alerta. Tú no quieres escucharla, pero sigue ahí. Notas que estar sin hacer nada no es bueno para ti, asi que pones la música para despejarte un poco del desfase que te diste ayer y la música te entra tanto por un oído que no escuchas nada más. Tus pensamientos se nublan y te olvidas de todo. O casi todo. La mirada que le hiciste no fue precisamente de "no te conozco de nada" si no de "quiero conocerte". Sé que la vida siempre me ha demostrado que todo vuelve a ti, de la mejor o la peor manera, pero vuelve dándote una patada en el culo. No se si aprovechar o salir huyendo, pero se que ese sueño es lo bastante grande para no perderlo de vista mientras lo persigo.

Diles que no.

Antes de que digas nada y rechaces todo esto de pleno. Dime al menos dónde puedo encargar a alguien como tú, igualito a ti, aunque sea una copia barata, lo daré por válido. Pero encárgate de que venga con todos tus defectos incluidos en el precio. Pídeles que me plagien tu esencia, y tu estúpida manera de reírte de mí. Que hagan una absoluta fotocopia de la forma que intentas ignorarme, y hacer con que me buscas a metro por encima de mi cabeza. Lo quiero igual de artista, con la misma iniciativa, no me importa pagar gastos adicionales. Diles que no escatimen en tus detalles, y que le jodan al copyright pero quiero calcadas todas tus palabras. Que no le cambien tu ideología, que siga sabiendo lo que quiere y hasta qué punto. Que le falten horas a sus días y que venga a robármelas a mí, aunque sea de madrugada. Pídeles que encuentren la fórmula que tienes para que me sea imposible pensar que hay algo más allá de ti y nuestra circunstancia. Aprovecha la oferta y exige que me lo envíen sin gastos de envío, con solo ganas de mí. Y si no es posible eso, pide al menos la garantía y asegura mi corazón a todo riesgo, porque últimamente está hecho mierda y no quiere ver a nadie que no seas tú.

Sin mirar atrás.

Aveces deseo desaparecer durante un tiempo, pero siempre termino haciéndome esa pregunta que me hace recapacitar.. De que sirve desaparecer? Si al fin y al cabo el problema se irá contigo, te seguirá hasta que se solucione, por eso, yo escojo el camino difícil. El camino de seguir hacia delante sin temor ninguno, sin vendas que me tapen los ojos solo para no asustarme de lo que me pueda encontrar a cada paso que de. Si tienes dos opciones muy buenas, y tienes que elegir entre una de ellas, haz lo siguiente: lanza una moneda al aire y así lo tendrás todo claro, no por lo que salga en la moneda, si no porque en el instante el que esta en el aire sabes lo que quieres que salga. Quizás mañana me arrepienta. Tal vez llore mucho por esto. ¿Pero qué mas da? La vida sin riesgo no es vida; aunque tengas que tirarte por un precipicio hazlo riendo. He aprendido que en la vida es más divertido ser idiota. Y no pensarlo, actuar sin más. Llorarás luego tal vez, ¡pero salta! No importan los golpes, ni las heridas, ya se curarán. De momento saborea la elección. Y aunque a la larga te des cuenta de que te has equivocado, ahora es lo mejor que podías elegir.

Pensar en otro lugar.

No existe el olvido, no se puede olvidar a una persona o un hecho, simplemente, se supera. Superas relaciones, superas miedos, superas perdidas, superas heridas, continuamente superamos cosas, pero no las olvidamos. No desaparecen de un día para el otro ni de un año a otro de nuestra mente, simplemente comenzamos a darle importancia a otras cosas u otras personas que nos van alejando de lo que nos causa daño hasta que logramos que no nos afecten más. Es una cuestión más que nada, de tiempo.. Por ello busco ese lugar donde perderme, donde nadie pueda encontrarme. Uno de esos rincones con magia propia, donde mis pensamientos hablen por sí solos. Donde no existan las dudas ni las preguntas retóricas, donde se aclaren mis ideas. Un lugar donde el sol bañe mi piel y el aire limpio inunde mis pulmones. Allí donde sólo llegue yo, donde nadie pueda interrumpir mis emociones ni malinterpretar mis palabras. Dónde mi voz sea el único sonido, aparte de las olas del mar y los susurros del aire al atardecer. En el cual pueda amar sin ser amada, llorar sin razones, chillar hasta desahogarme, reírme de mí misma, saltar para intentar llegar a las nubes, cantar hasta quedarme sin voz y soñar, ante todo soñar.

Ahogarse.

Todo muere. Todo es triste. Pero si hay algo realmente triste y malo, es la muerte de un sueño. Los sueños son como alas que permiten volar sobre las penas, pero a veces, vuelas tan cerca del sol que las pierdes y te quedas en lo que eras antes. Alguien sin ningún sueño. Esto te hace cambiar, ahora te sientes distinto, pero te hace considerarte como uno más de todos los que forman parte de tu vida. Ahora, tus sueños son mas humildes, mas realistas, y siempre tendrás una noche en la que podrás brillar con toda tu fuerza. Aunque no puedes evitar en pensar en aquellos sueños que una vez, para ti, fueron mas que eso. Esos sueños son como un suéter que has estado guardando aunque te quedaba pequeño, pero ahora ya puedes tirarlo, llorar, y pasar a otra cosa, porque la vida pasa y no frena por nadie.  Así que seguir, siempre, siempre, siempre, es importante. Los sueños ayudan a continuar con muca mas facilidad, pero muchas veces se rompen en mil pedazos, pero nunca hay que darse por vencido. Puede que uno de esos pedacitos, se quede contigo, para que te des cuenta siempre de que hay cosas que pueden desaparecer pero nunca del todo. Todo se vuelve oscuro alguna vez, en la vida de cada uno, pero a pesar de ello, el sol vuelve a salir.

Hace ya mucho tiempo.


Después de mucho tiempo, y haber cruzado varios caminos, al fin encuentro el mio. A pesar del mal tiempo, de lo mal asfaltado que estaba el sendero, o de lo poco que se podía ver, he sabido sobrevivir con lo poco que me he encontrado. A cada paso que daba, podría ser un paso hacia lo peor, pero siempre me encontraba alguien con quien compartir mis experiencias hasta el próximo paso que pudiera ser peligroso para mi. He descubierto muchas sonrisas que me han dicho que todo puede salir bien si piensas que te va a salir bien, y que las nuevas que te encuentras, pueden ser tan buenas, como la primera persona que te encontraste al principio de tu camino. Mi madre siempre dice que nuestra vida es como un autobús en el que se sube gente y puede durar todo tu trayecto o no. Para mi, es solamente un camino lleno de baches que tienes el deber de esquivar cual pokemón ante un ataque. Muchos damos a entender que somos los mas felices del mundo (que la mayoría del tiempo lo soy) pero, como toda persona, tengo mis momentos malos y bajones que, a veces, tengo que pasarlo solo, y otras muchas me apoyo en los demás porque todo me supera. Esto es una de las definitivas. Es uno de los pasos antes de llegar a la próxima etapa de tu vida, donde elegir es muy importante, y tu vida puede cambiar si eliges una oportunidad u otra. Así que solo me queda elegir bien a quien quiero que me acompañe en mi camino, de la mano, del hombro, o simplemente dándome conversación para que se me haga mas corto el momento de sufrimiento que este pasando en ese momento.

Dale vueltas a lo que piensas.

En estos últimos meses me han ocurrido muchas cosas malas y no he tenido el suficiente apoyo como me hubiera gustado tener. No se si es que han cambiado o he sido yo, pero parece que me han borrado de sus vidas y poco les importa lo que me haya pasado o lo mal que me encuentre. Yo, que siempre he estado al lado de la gente que lo necesitaba y ahora parece ser que están muy ocupados manteniendo sus vidas a flote. Pero nadie sabe que mi vida se hunde por momentos. Ahora que solo el 0,1% de la población le interesa mi vida, me siento lo bastantemente solo (sin despreciar a esa persona) como para echarme la culpa de todo lo que pasa y arrepentirme de todo lo que hice en algún momento de mi vida. Por que lo único que puedo hacer es, estar en casa y pensar lo bien que le va a los demás y lo felices que son mientras que las piezas de tu vida se rompen y dejan de encajar y la única que te escucha y te entiende es la almohada por las noches. No creo que nadie en los que ahora mismo estoy pensando al hacer esto lo lean o se den por aludidos. Quiero desaparecer. Y lo único que quiero hacer ahora es olvidarme de todos aquellos que se olvidaron de mi.

Un perdedor como yo.


La mayor parte del día, y muchos pueden confirmarlo, me lo paso riendo. Es una manera de hacer frente a la gente que pretende hundirme y saber que en vez de joderme ellos a mi, es al revés. Puede que funcione, o puede que no, pero a mi me sirve con saber que todo el mundo me reconoce por eso. Aunque siempre haya pensado que en la vida he fracasado como persona, sé que no lo he hecho como amigo, hermano o conocido. Muchas veces me pregunto por que digo eso, y sinceramente creo que es por el daño que me ha hecho todo el mundo que se ha subido en el mismo autobús que yo y solo se han subido, para quitar el sitio a alguien especial y sentarse ellos, para luego darle al botón y bajarse. Eso de que hay que ver el mundo "de color rosa" es una tontería muy grande, a mi parecer. El mundo cada uno debe verlo como lo sienta, como lo presienta y sobre todo como si fuéramos niños de 6 años. Los niños son los únicos que no ven el peligro en el mundo que les rodea, y ellos simplemente se dejan llevar por lo que les parezca mas bonito, mas colorido, o mas sonoro. Ellos son los que nos enseñan que arreglar las cosas es mas fácil con un abrazo. Solo me queda decir que muchos diréis que no, pero yo sigo siendo ese niño que jugaba en los patios a subirse a un columpio y no dejarlo hasta la hora que se terminara. Pero lo difícil es encontrar a alguien que lo vea todo así, porque para los demás un abrazo no les vale si no tiene la palabra "perdón" delante.

Olvidar, nunca.

"Se podría decir que fuiste la persona mas paciente que conozco, o tal vez estaría mejor decir, que conocí. Ya que, hace tanto que no hablo contigo, que posiblemente hayas cambiado hasta la personalidad. Tal vez no sepas que me arrepiento de haber hablado contigo en un mal día, aunque de lo que realmente me arrepiento es de haberte echo sufrir, o simplemente haberte hecho pasar, malos ratos. Hay días que sin decirte un simple Hola, te diría un sincero te amo. Como esos que antes era incapaz de reservar. Espero al menos que no los hayas olvidado. Ahora se que realmente eres feliz, y lo creas o no, me alegro, aunque me duela saber que ya no formo parte en tu vida. Y supongo que mucho menos me tendrás en mente. Yo, lo creas o no, cada día que pasa aunque sea unos segundos, me acuerdo de esos maravillosos paseos. Cada día que paso por ese banco en el un día de muchísimo frío nos sentamos. Soy incapaz de pasar de largo. Tal vez lo haya cogido como costumbre, pero al pasar me quedo mirando y me es difícil no recordar aquel día. Hace mucho que no se de ti, aunque no hace tanto que te vi por ultima vez. Puede ser que no leas nada de esto. Pero al menos espero que si no te acuerdas de mi, espero que te acuerdes de el perdón que te pedí, aunque dudo que este perdonado. Te quiero, y se que de una forma o de otra te querré siempre."

Tempus fugit.


A veces te paras a pensar en todo lo que has vivido, en la mayor cosa irracional que has hecho y la única vez que te sentiste un pequeño adulto. Piensas en todo lo que te ha hecho tropezar y volver a levantarte y en todo lo que una vez te dolió. Piensas en todo lo que has hecho sin pensar y que no salió como uno esperaba. Recuerdas los errores sin corregir y los incorregibles. Recuerdas que hay personas que no tienen razón, y momentos que no tienen perdón, pero sonríes. También todas esas locuras que has cometido y que sintiéndolo mucho, no te arrepientes de ninguna. Recuerdas con certeza a los que alguna vez fallaste y no pudiste recuperar y a los que aún sientas a la espalda, si si, espalda con espalda, al frente de todo lo que os venga por delante. Piensas en que tú también eres de aquellos que se recorrieron tantísimos kilómetros en redondo buscando su media naranja hasta que te diste cuenta de que no existía y que cualquier día podrías ser exprimida. O incluso que no existía una media naranja si no un limón entero que te ayudará no a complementarte, si no a formar parte de un mundo que vayáis construyendo los dos poco a poco. Sigue resistiendo a todas aquellas pequeñas cosas que te hacen pensar en lo mal que lo pasaste una vez en tu vida, pero sigue siendo fuerte y aférrate a aquellos momentos tan perfectos que pasaste cuando te sentabas al pie de las vías de un tren. Solo, con ciertas personas que sacan lo mejor de ti.

Bueno y malo, siempre van juntos.


Hay muchos momentos, por los que no te gustaría pasar. Y otros que estas deseando que pases. Muchas veces se juntan estos dos, y no tienes ni la menor idea de que hacer. Es decir, siempre has pensado en la idea de tu príncipe o princesa ideal, y cuando la encuentras y ves que no eres el suyo llega el momento que piensas que hubiera sido mejor, no haberle dicho nada. A pesar de esto, puede ser mucho peor. Cuando conoces a alguien con el que quieres estar y deseas que este a tu lado y se lo dices, ya te estás exponiendo. Pero te da igual. Sigues adelante pensando que nunca nada os va a poder pararos, y es entonces cuando tu cabeza se pone a pensar. Cosa mala. Se pone a pensar en cosas que no te gustan y ves en alguien que te parecía perfecto, cosas que no lo son. Puedes pasar, como hacemos muchos, pero tragar y tragar no es bueno. Por eso llega el momento mas duro de todos, decir adiós. Todos los que me conocen saben de muy buena tinta que odio las despedidas, y que siempre intento evitarlas a toda costa, intentando llegar al punto en el que me olvido de todo, pero no es posible. Ves que te hace sentir inferior a él, pero 1 momento bueno, no compensa a 10 momentos malos. Sé que debería luchar a toda costa, pero seguí luchando incluso hasta cuando se me dijo que parara, y cuando lo conseguí, no pude parar de acribillarle a mimos... Siempre he pensado que alguien que te quiere nunca te hace daño, pero a veces la regla se rompe en mil pedazos, igual que los recuerdos acumulados en tu memoria.

I must ask you a question

Bloggerooos, ya os dije que nuevas cosas vendrían y ya están llegando! Aquí tenéis la primera.

Es la nueva actualización. Si pincháis en la imagen que tendréis a la derecha o incluso en esta, os llevará al ask para que preguntéis dudas, novedades que os gustaría que hubiera en el blog o simplemente preguntas que os gustaría plantear sobre las nuevas entradas. Pronto llegarán maaaaaaaaaaaaaaas! No os las perdáis :D

Endless road.

Porque el final de un camino, sólo es el principio de otro y lo único importante es la persona que escoges para que camine a tu lado, aunque sea para esconderse en un desierto. Y esconderse es lo que menos te importa. Lo que te importa es que estás tocando con la yema de los dedos eso con lo que has estado soñando toda tu vida; y ya solo importa el hoy, y lo que queda por venir. Porque no se puede borrar lo que ya está escrito, y porque la vida es aquello que te sucede mientras tú tratas de hacer otra cosa. Día a día, noche a noche, las lágrimas van desapareciendo, cada vez me acuerdo menos de ti, cada vez mi mente olvida más. Olvida todo esos momentos, esos momentos en los que me creía algo junto a ti. Me habías llegado al corazón, me habias hecho especial, me sentía diferente a las demás tan solo por estar junto a ti...
Pero ahora, eso ya se acabó hace tiempo...No me quiero acordar de todos esos días, y lo estoy consiguiendo, creo que mi corazón lo está superando y creo que dentro de poco no quedará ni rastro de ti, dentro de mi corazón.

Sé fuerte.

Puede ser, puede ser que sea un cobarde, por no querer mirar lo que pasa a mi alrededor, por no saber admitir la realidad, de que en esta vida te llevas muchos palos, algunos merecidos, otros sin merecer, de haber conocido a personas que parecía que iban a estar toda una vida a tu lado, de haber llorado por tres cabrones de turno y por ese típico amigo que te pega la patada cuando ya no le interesas. No quiero mirar a mi alrededor, ya no quiero ver tanta falsedad. Pero hay algo que sí se. Y es todo lo que he aprendido. A valorar a quién realmente se lo merece, a buscar mi felicidad y a mirar por mí, y ahora que lo pienso soy un valiente, porque aunque no quiera mirar de frente a la vida y coger el toro por los cuernos, estoy aquí de pie, después de tantos palos, porque gracias a toda la gente que a intentado joderme, hoy soy más fuerte. Perdoné errores casi imperdonables. Intenté sustituir personas insustituibles y olvidar personas inolvidables. Hice cosas por impulso. Me decepcioné de personas que pensé que nunca me decepcionarían. Pero también yo decepcioné a alguien. Abracé para proteger. Reí cuando no podía. Hice amigos eternos. Amé y fui amado, pero también fui rechazado. Tuve miedo de perder a alguien muy especial. Pero lo que realmente hay que hacer es perder con clase y vencer con osadía. Porque el mundo pertenece a quien se atreve y la vida es mucho para ser insignificante.

Sorprende a tus emociones.

Agobio, rabia, tristeza, ganas de llorar... Son sentimientos que hacen sentirnos mal. Al contrario que la risa, la alegría, la paz... Pero mucho de estos primeros sentimientos podemos transformarlos en los segundos con un solo pensamiento. Por más que nos cueste, siempre tenemos que darle la vuelta a lo malo para poder ver la vida de otra manera. No voy a decir que querer sentirse solo, llorar y así desahogarse sea malo, pero siempre que lo hagas con una persona que este sonriendo ayuda mucho. Y sinceramente, creo que soy de esas personas que consiguen sacar una sonrisa y verle el lado bueno a todo, aunque me cueste la vida entera, tengo esa capacidad. Y quien me iba a decir a mi, que algo podría dárseme bien :D A pesar de que no siempre tengas ganas de saltar y gritar, hay mucha gente que si que quiere, y es esa que te da abrazos siempre que esta cerca de ti. Es esa que sin venir a cuento, salta encima de ti y no se despega para que la lleves a hombros, o esa que te sorprende con su sonrisa y manera de mirarte. Resumiendo, son las personas que retienen las sensaciones mas agradables que puede tener en un día. Por lo tanto, para que nunca tengamos que transformar las sensaciones malas, intenta no conseguirlas nunca, ya que son las que provocan el malestar. Y hacen que las noches, cuando estas tumbado en la cama a oscuras, mientras miras al techo fijamente, se conviertan en noches llenas de pensamientos que deberían volar de tu mente, trayendo los buenos recuerdos que acompaña una sonrisa.